Del pago secuencial al reparto simultáneo: el verdadero salto revolucionario
El mayor cambio que introduce FastChain NotCoin es la sustitución completa del modelo de pago secuencial (Fig. 1), que es el que domina la economía actual.
Hoy, el comerciante cobra el 100% del valor y, sólo con ese cobro asegurado, inicia un proceso lento y fragmentado: paga al distribuidor cuando puede, este paga al fabricante cuando corresponde, y así hacia atrás en la cadena.
Este modelo genera dependencia financiera, plazos inciertos, costos administrativos, inmovilización del capital y un desbalance de poder que concentra el control económico en los últimos eslabones.
📌 La innovación: reparto paralelo, instantáneo y justo
FastChain NotCoin elimina ese mecanismo obsoleto. Cada compra se convierte en un único pago que se divide en simultáneo entre todos los participantes reales del producto o servicio.
Esto es posible gracias a una herramienta clave: las CBU grupales programadas por los propios actores de la cadena.
🤖 ¿Cómo funciona en la práctica?
Cada producto en la plataforma lleva asociada una CBU grupal: allí están cargadas las cuentas de todos los que aportan valor real:
- productor
- fabricante
- distribuidor
- comercio minorista
Cada uno con un porcentaje de participación, acordado de antemano.
Ejemplo de un precio final de $1.000:
- Productor: 20% → $200
- Fabricante: 30% → $300
- Distribuidor: 15% → $150
- Comercio: 35% → $350
👉 Cuando el consumidor paga, el sistema ejecuta una sola transacción y el dinero se reparte al instante en esos cuatro destinos.
🎯 Se eliminan facturas cruzadas, demoras, reenvíos y conciliaciones contables.
Lo esencial del cambio
Con FastChain NotCoin, “vender y cobrar” es también pagar automáticamente a toda la cadena.
- No hay dinero retenido que no corresponda
- Desaparece la deuda interna
- Cada participante recibe exactamente lo que generó
- Disminuyen costos, errores y tiempos muertos
- Se previene la especulación basada en atrasos de pago
- Se elimina la necesidad de intermediación financiera innecesaria
El sistema hace visible una pregunta que nunca se formuló con claridad:
¿Por qué un único actor debe recaudar el 100% de un valor que fue creado entre muchos?
Aquí, el pago reconoce proporcionalmente el esfuerzo, el talento y las virtudes aportadas por cada integrante.
🚛 Economía alineada al flujo real del producto
En la economía tradicional, el dinero circula a contramano del producto: el comercio exige cobrar antes de liberar la entrega a la demanda. Ese camino es lento, costoso y alimenta jerarquías artificiales.
En FastChain NotCoin ocurre lo contrario: el flujo del valor sigue el mismo sentido que el flujo de bienes, reforzando la confiabilidad logística y evitando la fricción financiera.
Así:
- el producto llega a destino sin especulación,
- la cadena se integra con transparencia,
- se reduce la burocracia administrativa,
- la entrega se sincroniza con el verdadero consumo: el del consumidor final.
🧬 Una fábrica con identidad ampliada
FastChain redefine el concepto de “directo de fábrica”. La fábrica ya no es un edificio: es toda la cadena real que aporta valor. Sólo los participantes necesarios y verificables forman parte del reparto. Nadie más.
Esto genera una cooperación natural: si la cadena es la fábrica, todos se interesan en mejorar el producto total.
🌍 Un cambio simple con consecuencias enormes
La adopción de FastChain NotCoin transforma la comercialización en algo:
- más eficiente
- más justo
- más transparente
- más económico
- más rápido
- más alineado al valor real
Y lo hace con una operatoria simple de comprender y utilizar.
“FastChain NotCoin: cuando la economía se vuelve coherente con el valor que la sostiene.”